ModaUrb

Ropa de moda

Las mejores zapatillas para hacer Deporte

Al hacer ejercicio, incluso un simple paseo, es mejor utilizar un calzado adecuado. Esto no es sólo por la comodidad, sino también para garantizar un mejor rendimiento y seguridad para los que hacen ejercicio.

De hecho, las zapatillas de fila marca tendencia en la realización de actividades deportivas, sigue muy de cerca los puntos de tension, según el tipo de deporte que estemos realizando, para así lograr un enfoque mas completo; A continuación hablaremos acerca de los tipos de zapatillas según el deporte que vayamos a realizar:

Hay botas de tejido técnico o reforzadas para las condiciones más extremas (nieve, hielo o montañismo), zapatos bajos y microperforados para los paseos de verano y toda una serie de modelos intermedios.

Del mismo modo, hay zapatillas diseñadas específicamente para cada tipo de deporte, desde las zapatillas de correr hasta las de baloncesto, pasando por las zapatillas de gimnasia más generales. Se trata esencialmente de un calzado desarrollado en función del rendimiento exigido por cada disciplina y, por lo tanto, optimizado en función de los puntos de mayor tensión, así como para sujetar el pie y el tobillo y hacer frente a las lesiones más comunes.

Antes de elegir unas nuevas zapatillas es necesario tener en cuenta algunos aspectos esenciales, comunes a todo calzado, como el peso, el tipo de suelo sobre el que se van a utilizar y, muy importante, la postura individual y el apoyo plantar.

Empezar con el pie derecho y con seguridad

Este último aspecto, en particular, desempeña un papel fundamental en el bienestar de todo deportista. Por eso los deportistas de competición se someten a pruebas baropodométricas en centros especializados antes de elegir un nuevo par de zapatillas.

Las principales diferencias entre las zapatillas para correr incluyen aspectos interesantes de diseño, materiales utilizados y tecnologías empleadas (amortiguadores, estabilizadores y similares).

Cómo elegir el calzado para correr
El footing es uno de los deportes más populares que practican los italianos. Te permite estar al aire libre, entrenar solo o en compañía y, a nivel amateur, es más barato que otras disciplinas. Cuando hace calor, un par de pantalones cortos y una camiseta transpirable es prácticamente todo lo que necesitas para correr.

Sin embargo, hay un accesorio que no se debe escatimar: los zapatos.

El calzado para correr se divide en siete categorías:

Minimalista A0: estas zapatillas, como puedes imaginar, están reducidas al "hueso" o hechas con la intención de que la marcha sea lo menos artificial posible. La diferencia de altura entre la punta y el talón es, de hecho, mínima y casi se siente como caminar descalzo. Adecuados para carreras cortas y rápidas, son ciertamente cómodos, pero si se usan durante mucho tiempo pueden forzar la espalda.
superligeras A1 e intermedias A2: estas zapatillas se consideran "zapatillas de competición", con un peso inferior a 250 gramos. Son perfectas para corredores ligeros, expertos y rápidos. No proporcionan amortiguación y, por lo tanto, no se recomiendan para los principiantes.
Máxima amortiguación A3: son las más adecuadas para quienes entrenan regularmente pero sin exagerar, o para quienes se inician en la actividad del jogging por primera vez. Suelen ser cómodos y suaves y siguen la flexibilidad del pie.
A4 estables: están diseñados para quienes tienen algunos problemas de apoyo del pie y suelen ser recomendados por los ortopedistas tras un examen. Al ser estables, también pueden utilizarse para correr lentamente.
Trail running A5: específico para terrenos escarpados, adecuado para carreras de montaña.
Zapatillas de jogging A6: el calzado perfecto para los que quieren salir a correr relajadamente al final o al principio del día. Estas zapatillas no son excesivamente técnicas, sino que son las adecuadas para hacer footing o caminar a paso ligero. También son buenos para otros deportes que no sean correr.
Spike - especialista A8: calzado para competiciones en pistas de tierra.
Para elegir las zapatillas de correr adecuadas, también es importante saber cómo se corre. Cada uno de nosotros adopta una postura diferente cuando corre. Lo más importante, entender es en qué posición va el pie a descansar después de la llamada fase de "vuelo" de la carrera, es decir, en la mitad de la zancada.

En esta fase, el arco plantar sufre muchas tensiones, ya que tiene que absorber el peso del apoyo e inmediatamente dar energía al siguiente paso. Por tanto, se necesita estabilidad, elasticidad, pero también una amortiguación que debe ser adecuada al peso del deportista.

Para saber cómo corres (la llamada pronación), revisa las suelas de tus viejas zapatillas e identifica la parte más desgastada. Normalmente debería ser la parte exterior del talón y la parte delantera del pie. Si notas que las suelas se desgastan de forma diferente (por ejemplo, sólo en la parte exterior del antepié o sólo en la parte interior) puedes ajustarte en consecuencia eligiendo un par de zapatos más "técnicos" que también te ayudarán a mejorar tu postura.

El calzado adecuado para entrenar en el gimnasio
La zumba, el crossfit, las artes marciales y el body bulding suelen tener el mismo entorno de entrenamiento en común. Sin embargo, estos deportes son muy diferentes en términos de rendimiento físico y, por lo tanto, requieren un calzado adecuado.

Para el crossfit y la musculación se necesita una zapatilla no demasiado flexible y con suficiente "agarre", es decir, antideslizante, para una mayor libertad de movimiento del pie. Por lo general, son unas zapatillas bastante versátiles, ya que deben permitir una amplia gama de entrenamientos, desde la carrera hasta los saltos y la actividad de cuerpo libre.

Por eso es mejor elegir un calzado con un collarín reforzado en el tobillo (para evitar esguinces) y bien acolchado en el talón, para amortiguar los traumatismos al saltar y levantar pesas.

Para los amantes de la zumba y de las actividades aeróbicas en general, es necesario un calzado más versátil. Un modelo flexible y ligero, capaz de facilitar el pie y el resto del cuerpo.

Las mejores zapatillas para baloncesto y voleibol
Mientras que el fútbol ciertamente no requiere un tipo específico de zapato, el baloncesto y el voleibol no, y la elección puede parecer obvia sólo en apariencia.

Ni que decir tiene que es importante no intentar practicar estos deportes con zapatillas "normales" (una costumbre habitual, por desgracia), sino con un calzado especialmente diseñado.

Saltar, correr y mantener la estabilidad en suelos resbaladizos (parqué) son las tres características que hacen que el calzado sea indispensable en estos deportes. La ventilación, la protección de los tobillos, las suelas antideslizantes y una buena amortiguación son factores esenciales para elegir unas zapatillas de baloncesto o voleibol que sean seguras y capaces de limitar los riesgos potenciales que plantean estas disciplinas.

En particular, las zapatillas de baloncesto son bastante rígidas pero bien acolchadas, con una buena protección del tobillo. Las zapatillas de voleibol deben tener una buena capacidad para amortiguar el aterrizaje después de los saltos (especialmente en el talón) y garantizar la estabilidad durante los sprints laterales.

Lesiones deportivas y calzado inadecuado: ¿cuál es la correlación?
Empecemos por el baloncesto para aportar un dato que puede dar a entender la importancia del par de zapatillas adecuado para cada deporte. Un estudio sobre las lesiones deportivas más comunes realizado por la Universidad de Cassino1 demostró que el riesgo de sufrir un esguince de tobillo en el baloncesto aumenta cuatro veces si el jugador lleva un calzado con celdas de aireación en la suela, en comparación con los que llevan un calzado con suela homogénea.

Los esguinces, los problemas posturales o relacionados con ellos (dolores cervicales, lumbares o de hombros), las torceduras, son algunas de las principales lesiones deportivas que puede provocar el uso de un calzado no adecuado a la disciplina o a las necesidades físicas de cada uno.

No es casualidad que un reciente estudio del CONI en colaboración con el ISTAT2 haya demostrado que un tercio de las lesiones deportivas afectan al pie o a los movimientos relacionados con él. Esta estadística no tiene en cuenta los daños colaterales y a largo plazo causados por el uso incorrecto de un calzado no adecuado para el tipo de deporte elegido.

Por último, pero no por ello menos importante, el desgaste es un factor de riesgo que debe vigilarse siempre con atención y el calzado debe cambiarse regularmente.

Prevenir las molestias de una lesión con la póliza adecuada
Hacer deporte significa dedicarse a uno mismo, y a la salud en particular. A veces también significa aprender a conocer tus límites, intentando superarlos de forma consciente y adecuada a tu situación física y mental.

Además, es importante protegerse de las lesiones de todas las maneras posibles: eligiendo un entrenador competente, evitando el bricolaje y seleccionando cuidadosamente el equipo adecuado, como las zapatillas. Entonces, el pequeño accidente deportivo puede ocurrir... y si ocurre, es tu póliza de accidentes la que te dará tranquilidad a la hora de gestionar tus lesiones.




Site créé gratuitement grâce à OnlineCreation.me